Un perro en la familia siempre es sinónimo de felicidad y alegría. Los perros Golden Retriever, en particular, son los acompañantes perfectos para niños, jóvenes, adultos y ancianos. Su carácter afable y juguetón es ideal para compartir su cariño y compañía con todos los miembros de la familia.
Esta raza se caracteriza por su suave pelo dorado y por su gran tamaño. Pero a pesar de sus dimensiones, estos perros son muy amables, cariñosos y juguetones. Es parte fundamental de la personalidad de estos peludos ser amigable y fiel.
Un amigo para toda la vida
Esta raza de perro es particularmente fiel y muy cercano a los miembros de su familia. Es parte de la naturaleza de estos animales ser encantadores con todas las personas y socializar con todo aquel que lo conoce. Es muy raro encontrarse con perros Golden Retriever groseros o peligrosos para aquellos que lo rodean. Esto se suele dar si el animal ha sido maltratado o ha sido víctima de golpes.
Estos canes son parte de una de las razas más inteligentes que existen entre los perros, siendo capaces de aprender hasta más de 160 palabras distintas, y su temperamento y personalidad hacen que sean ideales para entrenar desde cachorros.
Carácter juguetón y cariñoso
Por su carácter son ideales para crecer junto a niños. Las relaciones que se entablan entre ambos son realmente adorables y beneficiosas tanto para el pequeño como para el cachorro.
Los niños con perros son generalmente más sociables y amables que otros chicos, mientras que los perros se desenvuelven en un ambiente de cariño y juegos que le permiten crecer sanos y fuertes.
Si bien como el mejor amigo del hombre son muy fieles, no se recomienda que estos sean perros guardianes. Esto se debe a que su propio carácter juguetón y cariñoso, hace que sea así con su familia y también con extraños. Esto, por otra parte, es bueno porque tu cachorro se involucrará tanto con tus seres queridos como con amigos y familiares.
Los perros no son simples mascotas, son miembros de la familia que dan amor y equilibrio al hogar. El cariño y amor que brindan es incondicional, por lo que este debería ser también recíproco hacia la mascota. Los perros hacen que cualquier momento del día esté lleno de diversión, entretenimiento y afecto. No hay nada mejor en el mundo que ver a nuestros perros sacudir su cola dorada de puro gozo y felicidad.